Es importante mantener limpio el oído del perro, porque esto evitará infecciones. Una limpieza adecuada y continua, evitará problemas en el aparato auditivo de nuestro perro.
El aspecto que presenta un oído limpio, es el de un perro con las orejas de color rosa. Para mantenerlas así, deberemos limpiarlas 2 veces por semana. Olvídate de hacerlo todos los días, porque podrías dañar el oído del perro.
Para su limpieza, podemos comprar un limpiador de oídos en una tienda especializada. Son de fácil aplicación. Una vez lo hayamos adquirido, deberemos introducir unas gotas en el oído (leer antes las recomendaciones), y taponarlo con algodón, para que el líquido no se salga. Pasado unos minutos, tiempo que también especificará la prescripción del producto, lo retiraremos. El algodón que saquemos del oído nos será muy útil para saber cómo de sucio estaba, y la frecuencia con la que finalmente se lo limpiaremos.
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